Reunion de sabios

Ironias de la vida, despues de mi particular 12 de Septiembre (con mas perdida de orgullo que humana), me toca representar a la empresa en un prestigioso Forum de Knowledge Management (o ‘Gestion del Conocimiento’ para los castizos) donde se reunen colegas del ramo para reforzar su autoestima y cultivar el intelecto.

Hago un inciso para anotar que tal esperado evento se celebra en la cercanias de Henley-on-Thames, prospero y bello lugar de la campiña inglesa. Recuerdo haber regalado a mi apreciado amigo Jorge “el banquero” un lienzo de tal paraje con ocasión de sus nupcias - parece ser que no fue de su agrado a juzgar por la ausencia de este en las paredes de su hogar.

Vuelvo al punto principal. Uno suele acudir a este tipo de eventos con la humildad propia de su nunca asumida condicion catolica y apenas interviene en el debate, posiblemente acongojado por el mismo complejo que permite a la seleccion española de futbol fracasar una y otra vez en competiciones internacionales. La naturaleza de tal complejo es aun desconocida, aunque se han descartado el de Edipo y el de Munchausen.

Resulta sin embargo muy reconfortante comprobar que, con alguna excepcion, la mayoria de los presentes son tan ignorantes como uno mismo, incluidos quienes hacen muestra de una futil verborrea en un ejercicio de onanismo compulsivo.

Con todo, el objetivo comun de los presentes es aprender algo, es decir, llevarse consigo una leccion que pueda ayudarles en su quehacer diario. Me temo que aquellos expertos que cruzaron mi camino durante el dia de hoy regresaron a casa rumiando que “cuando las barbas de tu vecino veas cortar, pon las tuyas a remojar”.