jueves, 30 de noviembre de 2006

Sujetando puertas

Se me pide que explique en qué se diferencian los hombres ingleses de los españoles. Obviando formas y volúmenes, solo se me ocurría el corte de pelo y el gusto por el tabaco de liar, así que planteé la preguntita capciosa a Karen, una inglesa compañera de trabajo, casada, casi en los 40 y, por lo que sugiere, con un pasado de vida alegre en el Madrid de los 90. Nunca he querido entrar en más detalles.

‘Los ingleses son más atrevidos’, sentencia ella sin apenas reflexion. ‘En el ligoteo, a vosotros os pasa como a la selección española de fútbol: que no chutais a puerta’. Explicate, love, que me estoy poniendo nervioso. Traduzco con sarcasmo lo que viene a continuacion. ‘Los españoles - continúa atrevida - sois encantadores y educados. Vais con una mujer, le cedeis el paso y le abris la puerta. Pasa ella y vosotros firmes, mirada estoica, viendola pasar con pose de verónica torera e indecisos si invitarla a un café o mejor al cine o a un paseo por el parque o… Mientras os decidis puerta en mano, se os cuela un inglés que por detras le ataca la yugular y a veces funciona y a veces no, pero ya le ha dejado la marca. Y vosotros ahí, todavía sujetando la puerta’.

Parece ser que de ahí viene el término
gilipuertas, digo.

martes, 28 de noviembre de 2006

Valencia pre-fallera

Fin de semana en Valencia, la capital de la tierra de las naranjas y hoy sede de las originales formas de Calatrava y anfitriona de la Americas Cup 07, la competición deportiva mas antigua del mundo. Los millones de euros chorrean por doquier y Valencia, como España entera, está en obras, desde el aeropuerto hasta las instalaciones portuarias. El día que nos falle el sector de la construcción va a aumentar la tasa de suicidios. Al tiempo.

Disfrutamos sobremanera de los agasajos de Rodol y Laure (y los gatos) y del fin de semana ibérico: alubias con chorizo (buenísimas!), botellita de vino tinto, paseo en mangas de camisa (finales de Noviembre!), siesta de tres horas, un café cortado como dios manda, niños jugando en los parques, la Pantoja en la tele, el hijoputa de Otegi en los periodicos… Vamos, lo de todos los días en Reading.

Una de las cosas que más llaman la atención en Valencia es el sistema de aparcamiento urbano implantado por consenso popular. Por todas partes hay una gran proporción de coches aparcados en doble fila bloqueando el paso a los que estan legitimamente aparcados. No hay problema. Todos tienen el freno de mano bajado (Valencia es plana) de tal forma que si quieres salir te arremangas la camisa y empujas el coche (o coches) que obstaculiza al tuyo y creas un espacio de salida, como si de un juego de tetris se tratara. Lo juro que lo he visto yo con estos ojitos que me ha dado dios.

Como no podía ser de otra forma, la anécdota del fin de semana sucedió en el aeropuerto. Diez de la noche, todo el mundo esta sentado en el avión de Ryanair de vuelta a Londres pero no despegamos. Hay un problema, dice un chaval con chaleco reflectante (al igual que con las corbatas, si vistes un chaleco reflectante significa que eres alguien). Hay 174 pasajeros en el avión pero sólo 172 tickets se han registrado en la puerta de embarque.

Se me ocurría entonces que aquello era una oportunidad perfecta para identificar la idiosincrasia de un país. Por ejemplo, en los USA ya habría entrado un comando de asalto para detener a los dos terroristas; en Israel, los dos pasajeros yacerían muertos en sus asientos y en Sierra Leona probablemente despegaríamos no dos sino cien más en el avión.

“Aquí sobran dos” concluye la sobrecargo española, con mimbres de lider. Rauda coge el microfono y con ese acento del Wall Street Institute financiado por sus padres invita a bajar de la areonave a los dos pasajeros que esa noche no tienen otra cosa mejor que hacer que dejar la costa mediterránea e ir a London Stansted. La conclusión no es muy aristotélica pero la solución es civilizada – pensaba yo para mis adentros – digna del talante típico de estos tiempos zapateriles que corren por la iberia. Vuelve de nuevo el del chaleco reflectante y dice que no, que no sobra nadie, que el problema es que hay dos pases que no han sido registrados en la puerta de embarque.

Eso ya no está en el manual y se entra en el terreno de la improvisación, otro sector que no contribuye al producto nacional bruto pero en el que los españoles somos líderes mundiales. A la torda ya no hay quien le quite el micrófono de las manos y le sale del alma un: “Two of you are not here, but are here”. Se hace un silencio de medio segundo y el pasaje entero, principalmente extranjero, rompe en una carcajada general. El avión temblaba. “Mr ticket number 176 and Mr number 177 come here immediately, please”. Al menos puso el please en la frase. Para entonces la gente hacía la ola y yo esperaba a Fofito salir de la cabina y preguntar eso de “cómo estan ustedes????”

Eso es lo que llaman marketing turístico. Los millones que se habran invertido en pasar del naranjito a las regatas millonarias, de la huerta a la arquitectura de vanguardia, del turismo playero a los esponsores suizos para que luego aviones enteros de turistas regresen a casa y cuando les pregunten por Valencia lo primero que respondan sea eso de: “Te vas a partir de risa cuando te cuente lo que pasó en el avión…”. Hasta habrá algún listillo que también lo cuente en su blog personal.

viernes, 24 de noviembre de 2006

Funeral ingles

Nunca había asistido a un funeral en el Reino Unido - nunca hay razón buena para harcerlo – pero siempre hay una primera vez y hace un par de días acompañamos a Andy en la despedida a su madre, quien murió de cáncer a los 53 años. Para aquellos que no le conozcan en primera persona, Andy es un buen amigo inglés que conocimos en Reading, muy apegado a la comunidad española y quien, algunos recordarán, leyó unas líneas en esforzado castellano durante la ceremonia civil de mi boda (cuya fecha, es cierto, aun estoy intentado recordar).

Un francés, un holandes y un español – como en el chiste, pero esta vez sin gracia – condujimos por dos horas y media hasta Piddlehinton, un pequeño pueblo de la Inglaterra rural, galornado varias veces por mantenerse muy bien cuidado.

El funeral fue de un estilo similar a los que se celebran en España: cortos, tristes y concurridos. La iglesia era pequeña pero coqueta y no muy fría, al contrario de lo que esperaba. El entierro era sólo para los muy allegados pero al resto se nos convocó en el pub del pueblo donde se servió un modesto buffet. Qué sería de este país sin el pub?

En Irlanda, me cuenta una compañera irlandesa, el funeral se prolonga por varios dias durante los que la gente bebe y se divierte, y se cuentan anécdotas sobre el difunto y se le recuerda en la alegría. A mí me gustarían que me despidieran de esa forma, así que tomen nota aquellos a quienes esto incumba!

martes, 21 de noviembre de 2006

Paris oh-la-la

Empieza la semana despues de un viaje relámpago a un Paris cada vez más magrebí, con un sol y un cielo de otoño de cine. Grande es Paris y, como Francia, aparentemente pro-europea salvo cuando le tocan los subsidios agrícolas o cuando la fruta viene de afuera o cuando la propiedad nacional de sus empresas esta bajo amenaza foranea. Entonces viene la respuesta es a la zidanesa.

Lo positivo de tanta protección patriotica es que los barrios parecen barrios, con sus tiendas de ultramarinos, panaderias y el bar de la esquina con la maquinita de petacos. Relegados quedan las cadenas de Starbucks, McDonald’s, etc. que devoran la personalidad de las ciudades.
Así que fue un gusto ir a Paris, ignorar Paris e ir al encuentro de parte de mi familia politica, seis Merelle más dos arrimados y el ‘bebito’ Lucas, que se cuentan pronto pero ahi es nada. A ver cuántos cabezas de familia pueden enorgullecerse de verse acompañados en viajes largos por cuatro vástagos en la veintena de edad. Algo bueno habran hecho. De tales palos, tales astillas.

viernes, 17 de noviembre de 2006

Finuras literarias

Siempre aprendiendo algo nuevo. Acabo de releer un correo electronico de trabajo. Lo leí un par de veces esta mañana y seguí a lo mío. Pero algo se había quedado dando vueltas en mi cabeza, y me he dado cuenta que alguien está llamandome educadamente la atención porque no le ha gustado algo que he hecho (no tiene razon, pero eso es lo de menos ahora). Qué educado. Tanto que casi no me entero.

He rescatado de mis archivos las siguientes frases, ejemplo de finura comunicativa a la inglesa. Les siguen una traducción campestre al castellano. Notese el (cobarde) uso de la voz pasiva en algunas.
  • ‘It has been brought to my attention…’: ‘que me he enterado’, ‘un pajarito me ha dicho que…’, ‘no te voy a decir quién es el chivato pero ya sé lo que ha pasado’;
  • ‘In the current climate it would be ill-advised to…’: ‘que vas a meter la pata…’, ‘yo que tu no lo haría’, ‘te lo estoy avisando…’;
  • ‘That comment does not show the person in good light’: ‘le has puesto verde’ ‘te has pasado’;
  • ‘I hope you are not easily offended by colourful language’: ‘no te lo tomes al pie de la letra’, ‘no te molestes, no es en serio’;
  • ‘I'm not sure where the confusion has arisen with my version of the events’: ‘que no te enteras’, ‘esta más claro que el agua’, ‘pero tu eres tonto o qué?’
Luego pasa lo que pasa, que respondes a la española (sujeto+verbo+predicado) y piensan que eres agresivo.

miércoles, 15 de noviembre de 2006

Lentejas

Estaban reposando en la olla a presion Fagor. Olian a gloria bendita. Toda la casa perfumada a channel de lentejas con chorizo. Llama a la puerta Ricardo el murciano, que viene a dejar un dvd, y es abrirle y él entrar como una exhalacion hasta la cocina. Joder, esto huele como en casa, macho – me dice, sus ojos casi entumecidos por la emocion - cuando volvia del colegio a la hora de almorzar y subia por las escaleras y de piso en piso – que vivia en un quinto! – el olor a garbanzos, a cocido, a repollo me iba embriagando hasta llegar a casa.

Es despedirlo, cerrar la puerta y la casa huele a jazmin! Rayos, hay un incienso encendido a traicion en el salon para deshacer el olor a lentejas que embadurna todo el mobiliario. Por qué en este mundo minimalista hay que oler a jazmin, beber light y desnatado y comer lentejas organicas inoloras? Mañana me veo montando guardia cuando haga patatas con carne.

martes, 14 de noviembre de 2006

Figuras esbeltas

Previendo la cantidad de abusos gastronomicos que rodean la Navidad, una cabra en mi oficina acaba de lanzar el "Christmas Chubby Challenge". Se trata de una especie de juego para incentivar el perder peso. Los participantes se pesan cada semana y por cada pound (0.45 kgs) que han ganado de peso pagan una libra (1.5 euros) en un bote. Quien haya perdido mas peso a finales de Navidad (aquí la Navidad se acaba el 23 de Diciembre) se llevara todo el dinero que haya acumulado en el bote.

La impulsora del proyecto, mujer y coetanea, ha comprado una bascula y una hucha, ha colocado una tabla con los nombres de la mitad del equipo y, ala, todos a pesarse y a apuntarlo. Craso error. Ella ha sido la primera y ha cogido un disgusto de padre y muy señor mio. Inconsolable. Dice haber batido su marca personal (por arriba). A mi me parecia que estaba jamona, en el mejor sentido de la palabra, pero desde hoy, después de haber dado tanto la lata con su peso, he empezado a verla con otros ojos y ahora, de perfil, me parece que tiene mas pliegues que la era cuaternaria.

Y tu, "Hafier", no te pesas? me preguntan curiosos. He hecho la "ronaldonada" y he dicho que no, que no me peso (Ronaldo lleva jugando cuatro años en el Real Madrid y todavia no han conseguido pesarlo). Esto de pesarse en stones (6.35kg) y pounds es ilegal en un pais de la Union Europea - me excuso - y si soy obligado a ello podria sufrir de ansiedad, discriminacion y hasta racismo. O todos nos pesamos en kilogramos o no participo, digo ante las sonrisas condescendientes de los compañeros concursantes. Vaya con el gracioso gordito europeo, me ha parecido que pensaba uno de ellos. El Director de Personal, quien tambien esta en el ajo, se ha tomado mis comentarios en serio, no vaya a ser que meta un
paquete a la empresa por culpa del jueguecito. A partir de hoy voy a traer pasteles a la oficina todos los dias.

sábado, 11 de noviembre de 2006

11.11.11

Hoy es un dia especial en este pais. Es Remembrance Day (o Armistice Day o Poppy Day o Veterans Day en otros paises). Se commemora el sacrificio de militares y civiles britanicos en la I Guerra Mundial y, por extension, en otras guerras. Es tradicion guardar dos minutos de silencio a las 11 am, cuando entró en vigor el alto el fuego.

Desde hace un par de semanas muchos llevan una amapola (
poppy) de plastico en la solapa fabricada por veteranos de la Legion Britanica. La amapola es el emblema elegido porque florece en los campos de Flandes donde se libraron las batallas mas sangrientas de la I Guerra Mundial.
Hay desfiles en distintas ciudades del pais, con gran asistencia de publico. Recuerdo haber presenciado uno cuando vivia en Edinburgo y la emocion y el orgullo era muy visible. Se te ponia la piel de gallina.

Yo encuentro admirable de este pais el constante recuerdo y el esfuerzo por preservar la memoria de aquellos que contribuyeron con sus vidas a forjar este mundo que hoy disfrutamos. En nuestra piel de toro, sin embargo, aun andamos a tortas entre nosotros, que si rojos o azules, que si derechas o izquierdas, que si Una entera e indivisible o que si no. Por cierto, he tropezado con un reciente articulo del maestro Perez-Reverte sobre el tema, de muy recomendable lectura.

viernes, 10 de noviembre de 2006

Maquinando

Sale un compañero contrariado de una reunion, jurando en hebreo. Un paisano parece que le tiene atravesado y no le da tregua. Tranquilo, mate, le digo, que yo te puedo echar una mano porque los españoles en otras cosas no, pero en esto de joder al projimo somos lideres mundiales. Una historia de 3000 años nos avala. Él asiente semiagradecido y nos vamos a la cantina, que es el lugar donde se maquinan todas las intrigas en esta empresa. Trae hasta cuaderno y boligrafo.
  • Primer paso. Confundele el nombre. Esto es universal y no falla nunca. No hay cosa que mas moleste que te llamen por un nombre diferente al tuyo. Aun más si es en publico y repetidas veces. “As John says …”, “I’m sorry, it’s Peter”, “Sorry Peter” y dos minutos mas tarde le vuelves a llamar John. Lo sacas de quicio poco a poco.
  • Segundo paso. Interrumpele constantemente, con buen talante, y cuando no le interrumpes, lo ignoras, ponte a leer. Cuando notas que está hasta los mismisimos y su tono se vuelve aspero le reprendes: “vamos a tratar este tema profesionalmente, no tiene sentido incluir discrepancias personales en este debate”. Esto les enoja mucho, que suelen darselas de “fair play”.
  • Tercer paso. Tocale. Esto desconcierta mucho al ingles, que no esta acostumbrado al sobeteo social salvo que sea en un estadio de futbol. Si lo tienes al lado, agarrele un brazo y meneaselo, como hacen las tias-abuelas coñazos. Luego unas palmaditas. El ingles se sube por las paredes, fijo. La reunion termina y le frotas la espalda amistosamente. A esas alturas ya le estara saliendo humo por las orejas, sentencio ufano.
El compañero asiste atonito a mi soliloquio. Que mala leche gastan estos españoles, debe pensar.

jueves, 9 de noviembre de 2006

Mi primera audicion

El invierno se acerca y la empresa va a lanzar una campaña de concienciacion ciudadana para reducir el consumo innecesario de agua. Piden voluntarios para grabar mensajes y difundirlos a traves de un podcast. Doy un paso al frente y aqui encantados porque mi acento “representara la diversidad de clientes que tiene la empresa”. Ahi es nada, toma responsabilidad. Cruzo el pasillo y acudo a la cita de audicion. Esperando hay un chaval indio o, mejor, del subcontinente indio, no vaya a ser que los de Bangladesh, Pakistan, etc. se mosqueen conmigo. Otro que va a representar la torre de Babel que es este pais.

Los consultores – uno se encuentra consultores hasta en la sopa - me dan el guion. La frase que lanzara mi voz a la fama, junto a la de Frank Sinatra y Constantino Romero es: "Using a bowl when washing vegetables saves 25 litres each time”. Basta que a uno no le guste lo verde como para que no paren de recordarselo.

Me ponen en la boca un microfono mas gordo que el muñeco de la Michelin. Cuando quieras, honey. Digo la frase una vez. Se cruzan las miradas. Que lo repita. Alla voy. “Dilo con mas impetu, como si estuvieses en la playa en Malaga”. Ya me estan tocando los cojones. Siempre Malaga. Y si no es Malaga, es Tenerife o Mallorca. Y si soy de Teruel o de Cuenca o de Ciudad Real o de Lugo? Y si los malacitanos me caen como una patada en el culo? Suerte que tienes que soy vasco pero de la periferia.

Repito la frasecita de marras. Que no diga westables, que es vegetables, me corrijen. Empieza a aflorar el rencor. Ocho intentos, diez minutos mas tarde y una cola del copon esperando fuera. “Paramos aqui – dice el tecnico de sonido con rictus frustrado. Todo suena igual”. Cabron. A que tu no sabes decir: tres tristes tigres tragaban trigo en tres tristes trastos sentados tras un trigal? Pues lo mismo.

miércoles, 8 de noviembre de 2006

Reboleando

Me preguntan mis amigos de Rebollar que en qué se diferencian las inglesas de las españolas. Las inglesas tienen las tetas mas grandes, respondo yo. No es que mi sentido del volumen sea muy avezado; lo dicen las españolas que trabajan en tiendas de ropa locales y que dicen no haber visto tallas tan grandes. Tambien, aqui hay mas rubias, la mayoria de bote, y muchas tienen los ojos claros y un andar distinto. Esa es la mayor diferencia. El andar de una inglesa con tacones es como el de un pingüino emperador con prisa, en el limite reglamentario de la marcha olimpica. No “rebolean”, que dirian en Brasil.

martes, 7 de noviembre de 2006

Como oveja trasquilada

Entre otras cosas, me joden las visitas al peluquero y al dentista. Aqui mas; me despiertan ansiedad linguistica. A los primeros no les entiendo con su acento de lector del The Sun - yo les digo que yes a todo y luego que salga el sol por donde dios quiera. De los segundos no comprendo la jerga que utilizan – ahi me callo y rezo.
Las peluquerias ya no son lo que eran. O al menos las que yo voy. Parecen McDonald’s de corte rapido. He pasado por una hace poco. ‘Corto por aqui, no tan corto por alla’ la digo con desconfianza. Saca la afeitadora industrial, le pone la cuchilla del 4 y me trasquila media cabeza. Las tijeras ni tocarlas. Cambia la cuchilla por la del 7 y ataca la otra mitad. Y las tijeras? Se pone de puntillas, baja que es ella, y asoman el ombligo cosido a piercings y la cabeza de dragon tatuada donde la espalda pierde su noble nombre. Dos minutos despues y quince euros menos (tarifa de estudiante!), parezco un cordero camino del matadero, como los de
Pancorbo, pueblo ovejero de donde es natural mi padre.
Aun recuerdo con nostalgia aquel corte de pelo en Rio de Janeiro. Cuarenta minutos del ala, tijera en mano, orgullo profesional y rictus de quien tiene la satisfaccion del trabajo bien hecho. Lo mismo en Buenos Aires, a tijeretazo limpio, aunque con ligero ceño fruncido, como si fuese culpa mia que sus abuelos leoneses hubieran decidido saltar el charco y los mios se quedaran en Castilla.

domingo, 5 de noviembre de 2006

Bonfire

Se oyen y ven fuegos artificiales. Esto parece Las Fallas pero en versión cutre. Si no estoy equivocado, hoy es uno de los pocos dias en los que es legal que el vulgo juegue con fuegos artificiales y petardos en este pais. Es la manera que tienen de celebrar ‘bonfire night’ o ‘Guy Fawkes night’, el intento fallido por parte de un grupo de catolicos de volar el parlamento ingles en 1605, con el rey Jaime I y la aristocracia dentro. Ni que decir tiene que fueron ejecutados. Les pillaron por eso, por catolicos. Con todo a su favor, durante los preparativos, se preocuparon por unos pocos catolicos que tambien iban a estar dentro del parlamento en el dia señalado y enviaron una cartita a uno sugeriendole que no acudiera aquel dia a la 'oficina'. Eso levanto sospechas y acabo con su plan. Fijate, si hubieran tenido exito, igual tendriamos por aqui a Froilan haciendo el payaso en vez de al Harry 'el juergas'.

viernes, 3 de noviembre de 2006

Tradiciones de los viernes

Los viernes es “dress down” en la empresa, es decir, se permite vestir de forma informal. Esta es una tradicion relativamente general en todo el pais. Te resulta raro ver compañeros y jefes enfundados en camiseta, jersey y vaqueros; hay alguno que parece que viene a dedicarse al bricolage en vez de enderezar el rumbo del barco. No suelen habituar las prendas estrafalarias aunque yo creo que aquellos que vienen con la camiseta de su equipo de futbol no se les deberia dejar entrar en la oficina. Una cosa es una cosa, y otra pasarse de la raya. Yo suelo ir de “casual smart”, como dirian los enterados. Ni tanto ni tan poco. El lema de un antiguo compañero era: “You dress smart, you think smart” pero esto podria discutirse bastante. El nunca llego muy lejos.

Si es viernes tambien es seguro que hay “fish & chips” en la cantina de los empleados. Otra tradicion. No esta mal, pero tampoco es para echar cohetes. En mis tiempos madrileños, creo recordar que el plato fijo de los viernes en muchos baretos era paella. Las comparaciones son odiosas.

El viernes es tambien el dia en el que los colegas, sin distincion de edad, sexo y galones, se acercan al pub para comenzar el fin de semana. Jefecillos, secretarias, maduros, curritos en general toman pintas de cerveza (ellos) o vasos de vino blanco (ellas). No es de extrañar toparse unas horas mas tarde con alguna madre (o padre) - bien entrados en los cuarenta, dos hijos, adosado y perro – soltandose el pelo y coqueteando con la tragedia. Pero bueno, eso es una historia para otro dia.

jueves, 2 de noviembre de 2006

Indigentes

Una cosa mas que llama la atencion en el Reino Unido con respecto a España son los modales que exhiben los mendigos. Digo esto y quiza este descubriendo alguno de mis prejuicios sociales.
Menciono mendigos pero quiza deberia decir indigentes or “homeless”, en contraposicion a aquellos que practican la mendicidad – muchos de estos parece que como un trabajo a tiempo completo, a veces con cierta agresividad, en semaforos y calles y otros lugares de la geografia urbana. (Nota: el diccionario de la
RAE define mendicidad como “Pedir limonsa de puerta en puerta” e indigencia como “falta de medios para alimentarse, vestirse, etc.)

Hace un par de semanas descubri, gracias a un articulo en
El Mundo, el weblog que escribe un indigente en Madrid. Responde al nombre, creo que imaginario, de Pedro Cluster. Tiene titulo universitario, tuvo exito laboral y circustancias de la vida le llevaron a su situacion actual. Escribe el blog desde bibliotecas o sitios con acceso gratis a Internet. Se lee muy bien y ofrece un relato diario personal sobre la indigencia muy interesante e informativo. Su blog se puede leer aqui. http://www.sinhogar.org

Vuelvo al contraste entre los dos paises. En mi camino de la oficina a casa, me cruzo en varias ocasiones con jovenes indigentes sentados al abrigo de un semiportal y una manta. Al pasar suelen preguntar: “Have you got same spare change?” Nodeo la cabeza y digo “Sorry, mate”, a lo que responden: “That’s okay. Have a nice evening.” Al principio pensaba que su buen deseo era una respuesta cinica ante mi negativa. Pero no es asi. He comprobado que esos modales se repiten una y otra vez y en muchas de las ciudades por las que he pasado aqui. Lo mismo ocurre con los indigentes vendedores de “Big Issue” (“La Farola” en España). Siempre sonrientes y educados, incluso despues de recibir mil negativas. Ayer la compre por primera vez en siete años.